El poder de la acción enfocada, apunta al factor X, que enfatiza el esfuerzo y su energía en un mismo punto, encaminado hasta lograr su cometido. Es un poder inmenso el identificar, con certeza, aquellas actividades que tienen mayor peso y valor en nuestra vida y cuáles llevan un gran esfuerzo. Al enfocarnos de forma adecuada logramos precisar lo que realmente es importante para nosotros, descartando lo rutinario o de menos peso, y nos damos el permiso de dedicar el tiempo a lo verdaderamente importante, con direccionalidad, garantizando de esta forma el éxito, la felicidad y prosperidad tanto en lo personal como en lo profesional.

Un aspecto a destacar cuando hablamos del factor X es la capacidad que cada uno de nosotros tenemos en cuanto a la disposición para autoevaluarse, observar los detalles, los procesos, lo vivido, aprender de los errores, efectuar los ajustes y comenzar de nuevo, pero en esta oportunidad, los esfuerzos y la energía están concentradas con claridad y precisión en lo que se quiere lograr, dándole direccionalidad a las acciones de acuerdo a las metas trazadas, con nuestro propósito de vida.

Esa habilidad para determinar la actividad adecuada, el sueño ideal o el camino indicado a seguir, como lo plantea Camilo Cruz en su libro, nos facilita el visualizar y autoevaluarnos para aprovechar nuestros talentos,  enfocar nuestros pensamientos de manera positiva accionando de manera correcta y con la mentalidad adecuada. Esto nos trae muchos beneficios para nuestro progreso como ser, nos brinda la posibilidad de usar mayor capacidad de nuestra mente y aprovechar al máximo el tiempo y los eventos que vivimos en ese tiempo, es oportuno señalar sobre el particular, que al enfocar nuestras acciones nos aseguramos que las actividades que programamos y ejecutamos en nuestra vida, en cada una de las actividades y tareas que realizamos sean coherentes con nuestros valores, creencias y propósito de vida.

Recuerden, nuestro éxito depende de la clase de decisiones que tomemos, por eso estemos de ahora en adelante más atentos en nuestro plan de acción que nos permita ser más efectivo. El avance hacia lo que deseas se construye un paso a la vez y no importa si tu progreso es pequeño, lo importante es que no dejes de progresar cada día hasta el momento que logres lo que buscas y te formules nuevas metas.

Para ello la mentalidad es primordial, no puedes ser creativo o tener ideas de cómo avanzar sin la mentalidad adecuada y para ello es oportuno seguir las orientaciones que propone Cruz en su obra, debes crear el hábito de: Pensar en lo que obtienes de cada situación en vez de lo que pierdes. Emocionarte imaginando el futuro y sus posibilidades en vez de recordar el pasado y añorar lo que fue y quejarte de lo que sucedió. Agradecer cada día lo que tienes, material e inmaterial, poco o mucho, dejando de preocuparte por lo  que  no  tienes  y  con  estos  pasos  y  pensamiento  creativo  con  actitud  vibrante  de progreso y evolución tendrás los hábitos y técnicas necesarios para lograr todo lo que quieras.

Te invito a administrar tu tiempo, tus esfuerzos, tu intelecto de manera efectiva y dale prioridad en tu vida a lo que es importante para ti, asegúrate de ser feliz, practica ejercicios de control sobre aquello que puedes controlar y relájate para que el entorno no te afecte, así estarás viviendo una vida balanceada, en armonía y plena, gracias a que tu norte  lo  trazaste  en  su  momento  con  claridad,  conduciéndote  al  lugar  que  deseas, recuerda identificar tu norte y vivir de modo proactivo.

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